viernes, 20 de septiembre de 2013

BOLIVIA, TIQUIPAYA: LA EMPRESA TOYOSA-CONSARQ CONTRA EL PUEBLO ¿LOS INTERESES DE QUIÉN?



Nuevamente intereses privados defendidos por el Estado en Bolivia...
 
Tiqui en guerra
x Puka Uma
“¿Has ido a guerrear?”, Nos preguntan lxs ch´itis (las wawas). Desde hace días en Tiquipaya, casi linde con Apote, el conflicto está en la ruta. Desde hace días la policía gasifica y dispara balines, las gente tira piedras.
Desde hace semanas la policía acampa en un solar desierto, custodiando la supuesta propiedad privada de uno de los emporios más ricos de Bolivia, la empresa Toyosa, siendo la hermana del Vicepresidente García Linera, una de las principales accionistas ¡con los reyes hemos topado!

El terreno en disputa se presentaba confuso en papeles, sin saneamiento y en un lugar estratégico, en la Cochabamba todavía agrícola y con encarecimiento del suelo por minutos. En dicho solar, se instalaba una feria los domingos, con carpitas improvisadas, muy cerca del super Hotel Regina (donde se acostumbran Cumbres, y otros despilfarros del tipo), y al lado de la Escuelita la Floresta una de las pioneras en cuanto a propuestas pedagógicas alternativas y comunitarias, 47 hectáreas (hacia la punta del cerro), de las cuales una parte reclaman las comunidades de la zona, como espacio de uso colectivo- mercado, zona verde- equipamiento – hospital - y la reivindicación de poder poner un freno a la incuestionable expansión de la mancha urbana, de la especulación y de la transformación del –pie- de cerro cochabambino.
Esta fue y es la reivindicación primera y de fondo.

El alcalde de Tiquipaya, Saul Cruz, del MAS, se posicionó con las y los comunarios/as en los primeros bloqueos que hubo hace semanas. Su partido se lo va a hacer pagar caro, por eso emprenden una acusación por malversación de fondos. A por él.
Ahora la gente vuelve a salir a la calle, y el Estado, sus guardianes y matones despliegan mano dura, protegiendo la propiedad privada, a los ricos, a los poderosos.
Los pocos medios de comunicación que llegan los primeros días hablan sólo con los policías, en una tarde en la que han gasificado, golpeado y obligando a echarse al suelo también a lxs niñxs. Por radios que se definen comunitarias cuantifican policías heridos, de los detenidos y las heridas por balín, de las gasificadas intentando llegar a su casa... ni palabra.
En silencio y cortando el paso, la policía “ de blanco, de verde y de todos los colores”, sin titubear ha reprimido varios días de nuevo al pueblo , en una discusión- mas allá de laberintos legales- entre propiedad privada y colectiva.

Ha reprimido ¿por qué? ¿Por proteger un terreno vacío, de poderosos empresarios? ¿por el reclamo popular de poder seguir siendo comunidad y poder seguir siendo agrícola?,¿ por el bloqueo vecinal en una zona donde cada dos por tres sufrimos bloqueos oficiales del ejército y policía para custodiar a algún importante alojado en el Hotel Regina? (obligándonos a transporte público y vecin@s de a pie a dar vueltas de más de 2 km).
Que paradógico…

Y como siempre aprendimos, frente a la represión, Reacción: cierre de válvulas y más bloqueos.
Pero ésta está siendo la reacción a una fuerte represión de días y noches, que no nos confundan.
Es necesario el debate y acción de si es legítimo o no reclamar espacios colectivos, si es posible o no el control e intervención a la propiedad privada, si es necesario ponerle freno a la expansión de la urbe. Como ya venimos viviendo en ésta supuesta economía “socialista comunitaria”, como la denomina García Linera- hasta que afecta al emporio familiar, claro-; l@s que quieren poner los discursos en práctica, reciben palo.